CONSTRUCCIÓN EN PIEDRA
La piedra es un material natural, que aparece como roca o molida en pequeños trozos, en última instancia arena. Como material, la piedra es difícil de vestir, pero es muy duradera. Es un buen conductor del calor o del frío, en una pared es mal aislante.
Las construcciones de piedra pueden utilizarse como piedras recogidas, en bruto (sin formas ortogonales), como estratos rotos con un grosor constante, como piedras labradas con formas regulares y, por último, como piedras labradas con material de unión.
El dintel es la composición lisa más sencilla. La piedra de pequeñas dimensiones de perfil y gran longitud es difícil de encontrar. Tales elementos son muy raros. El voladizo es la única composición posible de puentear dos postes o muros con elementos más pequeños. El voladizo es un sistema de superposición simétrica: un sistema con tensiones verticales únicamente. El resultado es un falso arco.
Un arco se compone de piedras labradas a lo largo de un vano, con un elemento final: una piedra de remate. Cada piedra está tallada en dos direcciones y la composición presenta tensiones verticales y horizontales.
Las composiciones espaciales incluyen una falsa cúpula con ménsulas (Rovero 2014), y una cúpula real con el uso de un arco.
Piedra en seco: piedra recogida y seleccionada
La composición más sencilla puede construirse con piedras brutas, recogidas en terrenos pedregosos. La recolección puede ser el resultado de la limpieza de campos y pastos o de una recogida especial para la construcción. Las piedras recogidas no tienen una forma exacta: la selección de las mismas es un trabajo hábil, al igual que la propia construcción. Cada piedra de la segunda capa tiene que "asentarse" en el lugar adecuado, solapándose con dos de la hilada inferior.
La ménsula, como composición espacial con hiladas horizontales de piedras en bruto, es el profesionalismo al más alto nivel. Se puede encontrar en la prehistoria: las tumbas entre Arabia Saudí y Yemen son del quinto milenio a.C. (Steimer 2001).
Piedra seca de estratos rotos
Los elementos de piedra de estratos finos, rotos en canteras, permiten obtener elementos con el mismo grosor, lo que asegura mejores construcciones con una forma controlada. La piedra en bruto no puede componer paredes uniformes ni curvas exactas, las piedras con dimensiones fijas sí.
Las hiladas de piedra en bruto deben cortarse en trozos más pequeños. La piedra se parte en el mismo grosor, pero puede cortarse en dimensiones y formas opcionales. El tallado también permite añadir elementos adicionales, como dinteles, pináculos o bancos.
Construcciones en piedra labrada
Las composiciones de piedras de grosor controlado presentan superficies de construcción regulares: muros verticales, tejados precisos con pináculos, también aberturas.
Los edificios con elementos controlados pueden construirse más rápida y fácilmente.
Construcciones de piedra con material aglutinante
La piedra seca puede fijarse con otros materiales. Se pueden utilizar cuñas finas de piedra para nivelar, y arcilla o mortero en las superficies de las paredes.
Las cuñas de piedra pequeñas sólo se utilizan para nivelar capas horizontales, no para la construcción. Este sistema facilita el trabajo.
Algunas construcciones más pretenciosas de piedra seca utilizan arcilla para el revestimiento final, total o parcialmente, como relleno entre las piedras sólo en la parte frontal. Esto se hace por razones sanitarias: los espacios entre las piedras son ideales para que aniden los insectos.
El arco y la cúpula
Comienza la construcción de edificios sencillos, con un menhir: pero esto aún no es arquitectura. Un solo poste no puede servir de arquitectura. Una hilera de menhires puede mostrar algo más: dirección o formas geométricas como primera idea de un objeto con varios fines.
Dos menhires, postes o placas verticales, cubiertos por un dintel, es un dolmen. Arquitectónicamente, es el primer refugio: cubierto y protegido por tres lados: izquierdo, derecho y superior. Varios dólmenes pueden componer una habitación: un corredor, pero es estrecho y largo, sobre todo utilizable como tumba en los monumentos prehistóricos de Cerdeña y de Bretaña.
La siguiente construcción son las ménsulas, formadas por hileras horizontales de piedras colocadas una sobre otra. Se trata de una construcción plana en sección transversal. El objeto utilizable más sencillo es una construcción longitudinal con ménsulas. Se puede ver en las celdas de las tumbas de las pirámides egipcias y en algunos pozos de España.
La composición final de la ménsula es una falsa cúpula de planta cuadrada o circular. Lo más importante es que se puede construir sin andamios: solo con las manos y el cerebro.
Los etruscos inventaron el arco en el segundo milenio antes de Cristo. Abre posibilidades para composiciones más amplias. como ménsulas y, por último, una auténtica cúpula.
Un arco necesita muros sólidos debido a las tensiones horizontales. Los elementos importantes de esta construcción son dos impostas, piedras labradas y la piedra superior. Todas las piedras están talladas al menos por dos lados. La piedra de remate es más grande, más pesada y siempre está ornamentada. Las impostas son visibles, pero no están tan ricamente ornamentadas como la piedra superior.
Todas las construcciones de arcos necesitan andamios y el momento más crítico es con la retirada de los andamios, cuando se puede comprobar la calidad de la composición.
La última composición que utiliza el principio del arco es una cúpula. Se trata de un arco en tres dimensiones que gira alrededor del eje vertical central. La primera cúpula fue la del Panteón romano, terminada en el siglo I de nuestra era.
Es importante tener en cuenta los hechos históricos: el arco fue inventado por los etruscos. Los romanos los conquistaron y destruyeron la nación en el primer milenio antes de Cristo, pero se hicieron cargo de su invención, que se desarrolló en tres dimensiones.
Todas estas construcciones necesitan muros sólidos. Los muros pueden construirse con piedras macizas o placas de piedra, y pueden ser constructivos o meramente decorativos. Las piedras se pueden empotrar en los muros como construcción en seco o se pueden unir con otros materiales: algunos trozos de piedras como cuñas, arena o mortero, finalmente con hormigón.